23 de junio 2011 | 1523 GMT
ResumenEstados Unidos está listo para lanzar 30 millones de barriles de petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo, con la idea de que el resto del mundo desarrollado coincida con esa cantidad. Este es el lanzamiento más grande en la historia de Estados Unidos y la primera vez que se hace en respuesta a los aumentos de precios. La política y la economía que conducen a la liberación son cuestionables lo que hace las razones de la decisión no sean claras.
Análisis
El Departamento de Energía de Estados Unidos anunció el 23 de junio que liberaría 30 millones de barriles de petróleo crudo de la Reserva Estratégica de Petróleo (SPR), las instalaciones de almacenamiento de energía de emergencia del país durante el próximo mes. El lanzamiento se llevará a cabo en conjunto con otros países desarrollados de Europa y Asia Oriental, que coincidirán en conjunto con el lanzamiento americano. El SPR se almacena en una serie de enormes domos subterráneos de sal en la costa del Golfo de Estados Unidos, inmediatamente adyacente a varios centros internos de transporte de energía. El petróleo liberado se utilizará casi exclusivamente en los Estados Unidos.
La medida plantea una serie de preguntas, ya que los motivos económicos y políticos en que se basa la cuestión son cuestionables. Stratfor considera que no hay necesidad de presionar para la liberación, por lo menos de acuerdo con las directrices legislativas que rigen la reserva.
Oficialmente la liberación ha sido anunciada por el Departamento de Energía como una respuesta a las perturbaciones en el suministro de petróleo de Libia. El conflicto actual se ha traducido en la eliminación de los mercados mundiales de alrededor de 1.6 millones de barriles por día de petróleo ligero y crudo dulce de alta calidad, un total de más de 150 millones de barriles desplazados desde que comenzó el conflicto. Casi ninguno de ellos es crudo que llega a Estados Unidos, se consume principalmente en Europa, concretamente en Italia y Francia, pero la pérdida de esa oferta ha tensado el aprovisionamiento global. El Departamento de Energía también señaló que la demanda de petróleo en Estados Unidos normalmente alcanza sus picos en julio y agosto, la temporada de vacaciones en América y que la liberación debe ayudar a aliviar un poco el alza de los precios de temporada. Sin embargo el petróleo se cotizaba a 95 dólares el barril justo antes de que la liberación fuera anunciada, muy por debajo de los $ 115 por barril que alcanzó en el inicio del conflicto Libia y mucho menos que los $ 140 por barril de mediados de 2008. Los precios cayeron rápidamente en $ 5 por barril tras el anuncio.
Esta es la primera vez que el SPR ha sido aprovechado de manera explícita como respuesta a los altos precios. Normalmente, la SPR es una cuenta de emergencia y sólo se utiliza cuando hay interrupciones genuinas y directas a los intereses energéticos norteamericanos. Por ello ha sido tradicionalmente aprovechado sólo a consecuencia de huracanes de gran intensidad o durante los conflictos militares. Hay unas pocas excepciones, la mayoría de las cuales están vinculadas a acontecimientos políticos nacionales, tales como negociaciones sobre el presupuesto en Washington o los cambios técnicos en el maquillaje de la SPR, cuando cambia su relleno a un mayor grado de crudo, por ejemplo. No vemos que este comunicado esté relacionado con negociaciones sobre el presupuesto actual, porque hay lanzamientos similares en otros 28 países. Los ingresos esperados de este lanzamiento sólo serían suficientes para financiar al gobierno federal de los Estados Unidos por un día.
El Congreso de Estados Unidos ha modificado recientemente las regulaciones de la SPR y faculta a la administración a adoptar una postura algo más liberal respecto a lo que constituye una situación de emergencia y de manera explícita señala que los altos precios del petróleo podrían justificar lanzamientos. Actualmente el SPR está más completo que nunca, con 727 millones de barriles de crudo almacenados. El objetivo de la legislación vigente es, con el tiempo, aumentar ese volumen a mil millones de barriles.
Los precios del petróleo son realmente demasiado elevados, pero no hay presiones sobre la economía norteamericana, especialmente en comparación con la actividad de los precios de los últimos tres años. Los precios de la gasolina están de hecho en niveles récord, pero el crudo impacta en menos de la mitad de los precios de la gasolina, y su liberación es de carácter internacional, por lo que no es posible que esté ligada a un problema doméstico de Estados Unidos. Cualquier esfuerzo por modificar los precios mundiales durante un período sostenido es muy probable que no dé resultado sin cambios sustanciales en la mecánica de la oferta y la demanda. Por más grande que sea la SPR y otras reservas similares en otras partes del mundo desarrollado, son necesariamente finitas y no equivalen a la producción fresca.
Los motivos económicos y políticos que obran detrás de la cuestión no tienen sentido. Que todo el mundo desarrollado esté involucrado sugiere que este no es un asunto interno de Estados Unidos ni tampoco es un tema que requiera un cierto grado de secreto, haciendo que las razones que obran detrás de la medida no sean claras.
La medida plantea una serie de preguntas, ya que los motivos económicos y políticos en que se basa la cuestión son cuestionables. Stratfor considera que no hay necesidad de presionar para la liberación, por lo menos de acuerdo con las directrices legislativas que rigen la reserva.
Oficialmente la liberación ha sido anunciada por el Departamento de Energía como una respuesta a las perturbaciones en el suministro de petróleo de Libia. El conflicto actual se ha traducido en la eliminación de los mercados mundiales de alrededor de 1.6 millones de barriles por día de petróleo ligero y crudo dulce de alta calidad, un total de más de 150 millones de barriles desplazados desde que comenzó el conflicto. Casi ninguno de ellos es crudo que llega a Estados Unidos, se consume principalmente en Europa, concretamente en Italia y Francia, pero la pérdida de esa oferta ha tensado el aprovisionamiento global. El Departamento de Energía también señaló que la demanda de petróleo en Estados Unidos normalmente alcanza sus picos en julio y agosto, la temporada de vacaciones en América y que la liberación debe ayudar a aliviar un poco el alza de los precios de temporada. Sin embargo el petróleo se cotizaba a 95 dólares el barril justo antes de que la liberación fuera anunciada, muy por debajo de los $ 115 por barril que alcanzó en el inicio del conflicto Libia y mucho menos que los $ 140 por barril de mediados de 2008. Los precios cayeron rápidamente en $ 5 por barril tras el anuncio.
Esta es la primera vez que el SPR ha sido aprovechado de manera explícita como respuesta a los altos precios. Normalmente, la SPR es una cuenta de emergencia y sólo se utiliza cuando hay interrupciones genuinas y directas a los intereses energéticos norteamericanos. Por ello ha sido tradicionalmente aprovechado sólo a consecuencia de huracanes de gran intensidad o durante los conflictos militares. Hay unas pocas excepciones, la mayoría de las cuales están vinculadas a acontecimientos políticos nacionales, tales como negociaciones sobre el presupuesto en Washington o los cambios técnicos en el maquillaje de la SPR, cuando cambia su relleno a un mayor grado de crudo, por ejemplo. No vemos que este comunicado esté relacionado con negociaciones sobre el presupuesto actual, porque hay lanzamientos similares en otros 28 países. Los ingresos esperados de este lanzamiento sólo serían suficientes para financiar al gobierno federal de los Estados Unidos por un día.
El Congreso de Estados Unidos ha modificado recientemente las regulaciones de la SPR y faculta a la administración a adoptar una postura algo más liberal respecto a lo que constituye una situación de emergencia y de manera explícita señala que los altos precios del petróleo podrían justificar lanzamientos. Actualmente el SPR está más completo que nunca, con 727 millones de barriles de crudo almacenados. El objetivo de la legislación vigente es, con el tiempo, aumentar ese volumen a mil millones de barriles.
Los precios del petróleo son realmente demasiado elevados, pero no hay presiones sobre la economía norteamericana, especialmente en comparación con la actividad de los precios de los últimos tres años. Los precios de la gasolina están de hecho en niveles récord, pero el crudo impacta en menos de la mitad de los precios de la gasolina, y su liberación es de carácter internacional, por lo que no es posible que esté ligada a un problema doméstico de Estados Unidos. Cualquier esfuerzo por modificar los precios mundiales durante un período sostenido es muy probable que no dé resultado sin cambios sustanciales en la mecánica de la oferta y la demanda. Por más grande que sea la SPR y otras reservas similares en otras partes del mundo desarrollado, son necesariamente finitas y no equivalen a la producción fresca.
Los motivos económicos y políticos que obran detrás de la cuestión no tienen sentido. Que todo el mundo desarrollado esté involucrado sugiere que este no es un asunto interno de Estados Unidos ni tampoco es un tema que requiera un cierto grado de secreto, haciendo que las razones que obran detrás de la medida no sean claras.
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