03 de mayo 2012
http://www.stratfor.com/geopolitical-diary/strange-times-china
Más allá de este relato nada se sabe con certeza. Según una versión, el gobierno chino amenazó con condenar a muerte a la esposa de Chen si se quedaba y la Embajada de Estados Unidos cedió a la presión. En otra versión, su salida de la embajada era parte de un acuerdo entre Estados Unidos y China en el que los chinos no castigarían a Chen. Unos dicen que Chen quería salir de China, mientras que otros describen su deseo de regresar a la aldea de donde vino. Estos son algunos de los rumores menos espeluznantes.
La cantidad de rumores en este asunto no es notable. Sin embargo, los medios de información como Twitter han mejorado enormemente la velocidad y la imprecisión de los rumores. En el pasado, el tiempo necesario para que los rumores se extendieran a menudo permitía que la realidad se pusiera al día. Ahora un rumor puede barrer el mundo en cuestión de minutos. El límite de caracteres no admite más que una afirmación, y no hay manera de juzgar la veracidad del remitente o el contenido. Los hechos son más difíciles de corroborar en una serie de tweets de 140 caracteres, sobre todo cuando su autor puede residir en Shanghai o en Brooklyn. El mundo no se ha vuelto más opaco, pero dentro de la opacidad proporciona la ilusión de mayor información.
Sin embargo, hay dos hechos claros en este caso. En primer lugar, Chen se encontraba en la embajada y se fue. En segundo lugar, la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, inició conversaciones con los chinos el jueves.
Debido a que ninguna de las partes quería una crisis que hiciera descarrilar las conversaciones, el gobierno chino criticó a Estados Unidos por albergar a Chen, pero sin duda le aseguró a Washington que podría permitir salir a Chen sin experimentar ningún sentimiento de culpa. Estados Unidos estaba dispuestos a revelar que Chen estaba realmente en la embajada y se iba con el embajador, con el fin de dejar claro que el incidente había terminado. Estos movimientos aseguraron que las conversaciones continuarían.
No es de extrañar que el acuerdo se haya hecho, pero todavía estamos reflexionando sobre las siguientes preguntas: ¿cómo puede un hombre ciego recibir la seguridad para hacer su camino desde la China rural a la Embajada de Estados Unidos en Beijing? ¿Cómo pasó la seguridad china alrededor de la embajada, y por qué los estadounidenses lo admitieron en su interior? Una organización muy capaz parecía estar operando bajo las narices de la Oficina de Seguridad Pública, tal vez los elementos del gobierno o del aparato de seguridad permitieron la huida de Chen por razones desconocidas. Tal vez una parte quería avergonzar a la otra y descarrilar las conversaciones.
La primera teoría es difícil de entender, y la segunda teoría no parece funcionar. Ambas partes han vuelto sobre sus pasos a fin de evitar que el incidente degenere en una crisis. Ambas partes podrían haber utilizado este incidente para crear vergüenza en el otro, pero ninguna lo ha hecho, al menos no todavía. No sería una sorpresa que China ofreciera garantías que Pekín no tiene intención de honrar una vez Clinton abandone el país, como si los norteamericanos creyeran a los chinos. Esto podría crear una crisis más adelante, no ahora.
Una serie de eventos inescrutables ha tenido lugar recientemente en China, incluyendo la caída del Secretario del Partido en Chongqing, Bo Xilai, el posible asesinato del empresario británico Neil Heywood por la esposa de Bo y las tensiones políticas en el Partido en relación con el incidente. La proliferación de estos extraños sucesos es intrigante. Ellos no muestran un patrón claro, pero la incertidumbre es un patrón en sí mismo. No estamos diciendo que estos eventos están conectados, sino simplemente que un montón de cosas extrañas están sucediendo en China, lo que no pasaba antes.
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